Rafael Lema// En la ría de Corcubión este verano destaca una nueva oferta turística, la del Taximar de David Trillo, una embarcación de este marino de Brens en Cee que traslada turistas a diversos enclaves del seno. El Taximar Robinsón da Lobeira de la peculiar Navieira Jalisia de David Trillo no para y cada día traslada visitantes locales y foráneos.
La motora de este capitán de remolcadores que se pasa parte de año en mercantes por todos los mares lleva a los usuarios a experiencias inolvidables, como el desembarco al pie del faro de la isla Lobeira, o pasar bajo el la puente de O Ézaro camino de la cascada en donde se produce la inevitable foto bajo la líquida cabellera plateada que cae entre duros peñascos de granito.
Trillo lleva parejas, grupos familiares, pero tiene subido hasta 17 personas. Ademas de estos «solpores fisterráns» a David sobre todo le agrada navegar a la caída de la noche «entre lusco e fusco, ata a noite pecha con lúa e calma chicha», repostando en media del estero en el retorno a su base en Corcubión.
Rutas marítimas por la Costa da Morte
El fin de semana se le unieron barcos de las empresas «Navega Finisterre» o «Cruceros Fisterra», de Fisterra; el primero con con capacidad para 12 personas, e hicieron juntos la ruta en la isla. Ambos tienen puntos de salida distintos, compartiendo todos muchos crepúsculos en el cabo del fin del mundo.
Una de las visitas recientes a Lobeira llevó a un técnico de una empresa de reparación de cubiertas y tejados, para una inspección a la casa faro de Lobeira en vista de una futura restauración de los tejados de la fachada derribada. Además de bautismos de mar, cumpleaños, traslado de deportistas, algún famoso de vacaciones también ha subido a bordo. Vecinos de la ría, nacionales y extranjeros descubren así los «recunchos» ocultos del seno marítimo de Corcubión. Trillo destaca que «en mareas vivas case se cheja co taximar ao pouso do coadurio do Ézaro, sen necesidade de usar bote a remos», como le pasó el 15 de agosto.