El Padova es noticia estos días por la iniciativa de la asociación de vecinos de Corme de instalar un bloque de mármol de Carrara de este barco, en un merendero de O Roncudo. La Consellería de Medio Ambiente ya les adelantó que dará el permiso para dicha actuación.
El Correo Gallego
La historia del Padova
El SS Padova navegaba de Montagarem-Argelia a Amberes, con una mercancía compuesta por paja, cáñamo y material de zinc. Sobre las 3 de la madrugada del 4 de febrero de 1923, se advierte la salida de humo de las bodegas. Había un incendio.Los intentos por extinguir las llamas resultaron infructuosos. El capitán optó por lanzar un mensaje de alarma mediante la telegrafía sin hilos.
En ese momento, el Padova se hallaba entre Corme y Cabo Villano a 44 grados de latitud y a 8 grados, 15 minutos y 3 segundos de longitud, según el meridiano de Greenwich.
El barco perdió el gobierno
El fuego en el cáñamo y la paja se extendió por todo el barco, provocando que se doblaran las planchas de cubierta y rompiendo los guardines del timón. El calor y el humo hacían la situación insostenible en el vapor italiano que acabó perdiendo el gobierno. Al desplomarse el puente, los tripulantes deciden abandonar el barco.
En uno de los botes iban seis marineros. Todos fueron rescatados, junto a los demás, con vida, por el vapor «San Tirso». A excepción del cocinero Giuseppe Di Biagio, de 50 años de edad.
Según nos detalla Rafael Lema en su «Catálogo de Naufragios», el Padova era un mercante, de 1126 toneladas de registro, 3.500 de desplazamiento, con matrícula de Génova. Se contruyó en Rostock- Alemania y pertenecía al gobierno italiano. El naufragio se localiza en As Abrilleiras, en la zona de O Roncudo, Corme(Ponteceso).El «San Tirso», que procedía de Torrevieja con un cargamento de sal, trasladó a los tripulantes al puerto de A Coruña.
Foto portada- AAVV Corme