Los vigilantes de la cofradía de pescadores de Camelle tienen que redoblar sus esfuerzos ante la diaria ocupación de los bancos de marisco, especialmente los de percebe, por un grupo organizado de furtivos procedentes de la comarca de Fisterra.Supuestamente el grupo está coordinado por un viejo conocido de los vigilantes por haber sido ya cogido con las manos en la masa en varias ocasiones, no solo por los agentes del pósito sino también por la Guardia Civil y la Policía Autonómica.
Profesionales del furtivismo
Además en el tramo del pósito que va desde cerca del cabo Vilán, hasta la punta de Laxe, actúan furtivos de Camariñas, también conocidos por los vigilantes y reincidentes. A estos suma la presencia de cientos de turistas en este mes que ocasionalmente también sisan algún marisco, pero sobre todo hacen que los vigilantes dispersen su atención y los profesionales del furtivismo tengan más tiempo para su faena.
Percebe y nasas con marisco
Los furtivos se ocupan sobre todo del percebe, pero también del robo de nasas de marisco (pulpo, nécoras, centollas), mientras que los turistas además de percebe intentan llevarse bígaros, erizos, mejillón, orejas. En Camelle solo queda un barco de pesca por lo que los socios del pósito son sobre todo naseiros que andan al pulpo, y mariscadores, especialmente los percebeiros que forman la mayor parte de los profesionales.
El patrón mayor de la cofradía Xosé Xoán Bermúdez no cesa de pedir ayuda en la lucha contra el furtivismo que se lleva buena parte del gasto del pósito, de vez en cuando lanza mensajes de concienciación a la población para el respeto a los recursos de los profesionales. Hace unos días los guardacostas se llevaron 84 nasas sin identificas de las rías de Camariñas y Corcubión.