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El naufragio de este barco fue salpicado entre conmoción, polémica y conspiraciones alrededor del accidente, la armadora y el cargamento.
El Tito Campanella, de bandera Italiana, su armadora era Aframar-Savona, de 13.342 toneladas, construido por Ansaldo S.A Livorno, de 175 metros de eslora, botado en 1961 y con 24 tripulantes, había salido de Oxelösund(Suecia), donde partió el 7 de enero de 1984,con destino a Eleusis (Grecia), donde tenía planificado llegar el día 24-25 de enero. El barco estaba al mando del capitán Luigi Specchi de Viareggio.
La última noticia que se tuvo del barco fue el día 14 de enero, informó que estaba posicionado a 100 millas de Cabo Vilán, aunque La Voz de Galicia corrobora que el lugar donde se perdió la comunicación con el buque fue a 46 millas al norte de la costa gallega.
El mercante italiano cargado con 20.260 toneladas de planchas de acero, estaba navegando con olas de 10 metros y unos vientos de fuerza 8 en ese momento. Desde aquí del buque no se obtuvieron más noticias.
Aunque una unidad argentina había comunicado que había recibido un mensaje del barco que decía que había pasado el estrecho de Gibraltar, y había recibido otro supuesto mensaje del Tito Campanella diciendo que estaban pasando ya el Mediterráneo, con estos datos tan extraños había medios de comunicación que ponían sobre la mesa la posibilidad de que el barco permaneciera escorado desde Cabo Fisterra hasta la bahía de Cádiz donde se habría hundido finalmente, pero a esta idea no se le dio bastante fuerza.
LA BÚSQUEDA DEL BUQUE
A partir del 21 de enero se movilizaron los medios de salvamento españoles al notificarse el barco como en paradero desconocido. El día 23 se movilizaron medios aéreos portugueses y también se desplegaron numerosos medios por parte de Francia, donde estuvieron rastreando la zona de Estaca de Bares. El día 26 de enero se unirían los medios italianos. El día 26 ya se daría oficialmente por fallecidos los 24 marineros del buque italiano.
La búsqueda cesaría días después sin éxito, ya que no encontraron ningún cuerpo de las 24 personas que iban a bordo ni ningún objeto perteneciente al buque.
RESULTADO DE LAS INVESTIGACIONES POSTERIORES
La investigación del caso tras el naufragio concluyó que el temporal que había en la costa gallega hizo que se corrieran las planchas de acero que provocó que rompieran algunos mamparos de la bodega 5,provocando una fuga de agua de grandes dimensiones, haciendo así que el barco escorase. El hundimiento fue inmediato sin que diera tiempo a activar los servicios de emergencia a bordo.
Los periódicos de la época decían que el barco estaba muy mal estado, oxidado y con numerosos desperfectos en el casco de la nave italiana. Un experto sueco en 1983,en diciembre, dijo que en las bodegas había numerosas deformaciones, y que presentaba pésimas condiciones para navegar.
La comisión de investigación dijo que la estación de telégrafo de a bordo estaba en mal estado, no había suficiente personal a bordo y los dispositivos de salvamento eran viejos. Se echó la culpa de un cargamento mal estibado y a que el mercante había estado un año fuera de servicio, también se recalca en la investigación que la cubierta del barco estaba bastante oxidada.
RELATO DEL SS SERENITAS
Un ex cadete de cubierta, embarcado en el SS Serenitas de la compañía Ítalo-monegasca «Ravano». Había partido de Río Grande(Brasil) con destino a Liverpool. En la costa gallega, cuando se encontraban a 150 millas del buque italiano, la tripulación del SS Serenitas escuchó una conversación radiotelefónica entre el Tito Campanella y un buque alemán, donde el Tito Campanella le pedía auxilio y donde el buque alemán así lo prestó. El buque alemán hizo varias maniobras para posicionarse transversalmente para resguardar al Tito Campanella del temporal, pero nada se pudo hacer, y naufragó.
ANTIGUOS MARINEROS DEL BUQUE TIRARON DE LA MANTA
Guglielmo Giuste fue un antiguo marinero del Tito Campanella. Él había rechazado el embarque en la nave en su último viaje por las malas condiciones del buque. En abril de 1983 decidió irse tras haber vivido una experiencia angustiosa dentro del casco italiano. Había sido un viaje desde Casablanca a Rotterdam, donde tuvieron que parar por una avería en la máquina y donde el barco se balanceaba de manera peligrosa en las olas de las frías aguas del atlántico.
¿TRANSPORTE DE DESECHOS TÓXICOS Y ARMAS A BORDO?
Un marinero embarcado anteriormente en el barco había informado en los periódicos tras el accidente que existió un tráfico ilícito de armas y desechos tóxicos en el Tito Campanella.
Fue un ex maquinista, Florentino Fabio Bruni, que había informado en 1988 al diario La República que el Tito Campanella había transportado ametralladoras de fabricación soviética, gas nervioso y material radiactivo.
El transporte de tóxicos se descargaba en Francia, más concretamente en el puerto de Le Havre, según corroboraba el marino. Estos desechos estaban sellados en grandes bloques de hormigón, embarcados en Marruecos y desembarcados, como anteriormente dijimos en Francia. Bruni había recibido llamadas telefónicas amenazantes anónimas los días posteriores al naufragio.
LA SENTENCIA
Los jueces del tribunal de Savona condenaron a 1 años y 8 meses por homicidio múltiple y homicidio involuntario a un miembro de la empresa armadora, un inspector, al comandante del puerto de Oxelösund y el jefe del equipo que realizaba las operaciones de carga, otros ocho acusados fueron absueltos.
DÉCADA DE LOS 80,ÉPOCA DE GRANDES DESAPARICIONES EN LA COSTA GALLEGA.
Hace un par de meses ya hablábamos en este portal digital sobre las extrañas desapariciones de otros barcos en la costa gallega en esta terrible década, como la desaparición del Kronos, en al oeste de Cabo Fisterra en 1989, donde tras una larga búsqueda no se encontró ningún objeto perteneciente al barco, o el mercante griego Leslie en 1981 donde se le había perdido la pista a 160 Km del Cabo Vilán y lo único que se recogió de él fue una balsa salvavidas flotando a la deriva…
